La comisión Justicia y Paz aseguró que las condiciones de la población son 'incompatibles con la supervivencia" y reclamó el cese de los bombardeos.
Católicos, protestantes, ortodoxos, judíos, musulmanes y budistas coinciden en afirmar que, de aprobarse, se estaría ante "una ruptura antropológica".
Declaración conjunta de la SECAM y de la Comece en la que expresan su preocupación por "un cambio profundo en las prioridades europeas".
El pontífice desea continuar "el diálogo en el espíritu de la declaración Nostra aetate del Concilio Vaticano II", que marcó un cambio en las relaciones entre la Iglesia católica y el judaísmo.