Los líderes religiosos en Siria hicieron este llamamiento a la ONU y a las naciones que desde hace años imponen sanciones y embargos económicos al país, calificándolas de "inicuas" ante la tragedia.
El padre Alejandro Cunietti, del Instituto Verbo Encarnado, se encuentra en Tarso desde fines del año pasado. Relató cómo vivieron el terremoto en el país y explicó cómo acercar ayuda.
El custodio de Tierra Santa, consideró "escandaloso" que, en este momento, las sanciones vigentes de los EEUU y la UE contra ese país impidan la llegada de la ayuda internacional.
El padre Jacques Mourad -monje sirio del monasterio de Deir Mar Musa, que será ordenado arzobispo de Homs de los católicos sirios a principios de marzo- recorrió las devastadas calle de Alepo.