Junto a la imagen del beato Mamerto Esquiú, la Virgen fue llevada al Predio Ferial de la provincia. La invocación religiosa fue encabezada por el obispo diocesano, Mons. Luis Urbanc.
Niños y adolescentes participaron de una peregrinación hacia el santuario de la Virgen del Valle, donde se celebró la misa. Se rezó también por los misioneros en diversas partes del mundo.
Se realizó en la casa de Emaús de la ciudad capital del viernes 27 al domingo 29 con la peregrinación y la misa en la gruta de la Virgen del Valle.
Los actos litúrgicos fueron presididos por el obispo, monseñor Luis Urbanc en Tinogasta y por el presbítero Juan Ramón Cabrera en la catedral de Catamarca.