"Tengo ganas, sí", respondió en una entrevista concedida a la provincia china de los jesuitas. Con estas palabras, Francisco confirmó su disposición de realizar un viaje apostólico al país asiático.
Al recordar que el santo "es de todos", "no de un partido o un sector social", tambien de los empresarios, que tienen que generar empleo para erradicar la pobreza".
El Santo Padre reanudó sus audiencias generales después de las vacaciones de verano, reflexionando sobre la obra del Espíritu Santo en la Redención realizada por Cristo.
El Santo Padre pidió a las partes implicadas evitar una escalada del conflicto, y rezó también por la paz en otras partes del mundo.