Con el lema "Con María y Ceferino, peregrinos de la esperanza", reunió a 110 referentes e integrantes de las distintas áreas pastorales, junto a los sacerdotes de la jurisdicción.
El obispo-prelado de Esquel presidió la Misa Crismal, que concelebró el clero, y bendijo los óleos para utilizar en los sacramentos. Los sacerdotes renovaron sus promesas.
El obispo local, Mons. Slaby, autorizó a la Federación a desarrollar su programa educativo en ese territorio eclesiástico, sumándose a otras jurisdicciones que promueven el escultismo.
El Equipo Nacional de Pastoral Aborigen expresa su preocupación por un desalojo inminente de una comunidad mapuche en Esquel. Recordó que los pueblos indígenas "preexisten, existen y tienen derechos".