León XIV se reunió con 250 peregrinos jubilares y subrayó el valor ecuménico de la iniciativa, que une a católicos, luteranos y a todos los que apoyan de la beatificación del arzobispo Profittlich.
Ante miles de representantes de las periferias del mundo, León XIV pidió poner la dignidad humana en el centro y reafirmó que "tierra, techo y trabajo" son derechos sagrados por los que vale luchar.
La marcha fue de la iglesia del Socorro a la Catedral. El arzobispo de Buenos Aires, monseñor García Cuerva, caminó con los fieles y los animó a ser "peregrinos de esperanza" y "cruzar fronteras".
El pontífice envió un mensaje de cercanía y fraternidad a los pueblos indígenas y su pastoral, quienes del 14 al 16 de octubre celebran su Jubileo virtual.