La jornada, que reúne a personas que no tienen con quien compartir la Nochebuena, regresó con la esperanza de ofrecer un momento de calidez y comunidad a los que más lo necesitan.
Los agentes pastorales animan a un mayor esfuerzo para lograr "un diálogo fecundo, para encontrarnos en las diferencias y creyendo, con realismo, que es posible un futuro mejor".
La Pastoral Social y otros organismos de esa arquidiócesis afirman que psicólogos, médicos y directivos coinciden en que no es conveniente enseñarla a tan temprana edad.
El arzobispo de Córdoba reflexionó sobre dos actitudes contrapuestas que pueden surgir ante la visita de Dios, e instó a hacer memoria de la grandeza del Señor y "cantar nuestro propio 'Magnificat'".