El doctor Nicolás Laferriere, miembro del Centro de Bioética, Persona y Familia, advirtió que la condena injusta al médico Leandro Rodríguez Lastra, que salvó la vida de la madre y del niño por nacer, reabrió el debate sobre la cuestión decisiva de la objeción de conciencia de los profesionales de la salud. "La objeción de conciencia es un derecho y un deber para los médicos católicos", subrayó en un artículo.
Distintas agrupaciones firmaron ayer un compromiso por la vida y la familia en la sede del Partido Demócrata Cristiano porteño, donde brindaron un reconocimiento al doctor Leandro Rodríguez Lastra "por haber salvado las dos vidas en su lugar de trabajo, con profesionalidad y cumpliendo su juramento hipocrático, todo con la mayor felicidad". Hablaron el presidente de ese partido, doctor Carlos Traboulsi, abogado penalista; la abogada Alejandra Muchart y la médica Ana María Parini. "Salvar vidas no es delito", dijo el doctor Rodríguez Lastra, que fue saludado con vivo afecto por los asistentes.
El médico Leandro Rodríguez Lastra, acusado por un juez rionegrino de supuesto "incumplimiento de los deberes de funcionario público" por salvar la vida de la madre en riesgo y de su hijo por nacer, continúa recibiendo apoyos y solidaridad de obispos e instituciones que consideran injusto y arbitrario el veredicto condenatorio.
[p=5259112820194] Ante la anunciada voluntad de presentar en el Congreso un nuevo proyecto que pretende legalizar el aborto, organizaciones provida advierten sobre este "nuevo despropósito" y aseguran que la idea de otro debate "de ningún modo responde a una genuina demanda social, por el contrario, esconde los verdaderos problemas que atraviesa la Argentina".