Miércoles 13 de noviembre de 2024

JJOO 2024: los obispos franceses deploran las 'escenas de burla del cristianismo'

  • 27 de julio, 2024
  • París (Francia) (AICA)
En un comunicado, se dirigieron "a los cristianos de todos los continentes que se han sentido heridos por el exceso y la provocación de determinadas escenas en la ceremonia inaugural".
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Un día después de la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos, la Conferencia Episcopal Francesa (CEF) lamenta en un comunicado que, "desgraciadamente, la ceremonia incluyó escenas de escarnio y burla del cristianismo, que lamentamos profundamente", algo que han denunciado diferentes confesiones religiosas.

Los obispos elogiaron los "momentos maravillosos de belleza, alegría y ricos de emociones". Sin embargo, dirigieron su pensamiento "a los cristianos de todos los continentes que se han sentido heridos por el exceso y la provocación de determinadas escenas".

En el centro de las críticas en las redes sociales, estuvo una reproducción viviente del cuadro "La Última Cena" de Leonardo da Vinci, realizada por una decena de hombres travestis.

La ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos, en su conjunto, fue superlativa en todos los sentidos. Tuvo una primera parte que se desarrolló en el Sena, con un desfile de las delegaciones deportivas en 85 barcos, numerosas pinturas artísticas y actuaciones de artistas de todo el mundo, como la estadounidense Lady Gaga o la canadiense Céline Dion.

Solidaridad de otras religiones
Después de la ceremonia, retransmitida por televisión, numerosos líderes de otras confesiones religiosas expresaron su solidaridad con la Iglesia católica francesa, señala el comunicado.

"Esperamos que comprendan que la celebración olímpica va mucho más allá de los prejuicios ideológicos de unos pocos artistas ", prosigue el mensaje de la CEF, en referencia a los cristianos de todo el mundo que pudieran haberse visto afectados por las imágenes.

Más allá de las representaciones, el episcopado francés recuerda el éxito de la "misa de apertura de la tregua olímpica" que contó, hace una semana, con numerosas personalidades religiosas, políticas y deportivas". 

Para los obispos, "los valores y principios expresados y difundidos por el deporte y el olimpismo contribuyen a la necesidad de unidad y fraternidad que tanto necesita nuestro mundo, respetando las convicciones de todos, en torno al deporte que nos une y promueve la paz entre las naciones y los corazones". 

"El deporte es una maravillosa actividad humana, que deleita profundamente los corazones de atletas y espectadores por igual. El olimpismo es un movimiento al servicio de esta realidad de unidad y fraternidad humanas", reivindican los prelados galos, a la vez que desean: "Abramos paso al campo de la competición, ¡que traiga verdad, consuelo y alegría a todos!".

Ante las solicitudes de explicaciones, Michaël Aloïsio, portavoz del comité organizador de los Juegos Olímpicos de París 2024, reaccionó este sábado 27 de julio en Franceinfo: "Estamos cambiando las líneas", aseveró.


"Una burla grosera y frívola"
Por su parte, el obispo de Winona-Rochester y presidente del Comité de Laicos, Matrimonio, Vida Familiar y Juventud de la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (USCCB), Robert E. Barron, pidió a los católicos levantar la voz ante la representación "grotesca" de la Última Cena en los Juegos Olímpicos de París 2024.

El obispo Barron se refirió en su cuenta en la red social X a uno de los momentos de la ceremonia inaugural, en el que performers 'drag queens' representaron de forma breve la Última Cena.

A ese respecto, el obispo cuestionó: "¿Alguna vez se habrían atrevido a burlarse del Islam de una manera similar? ¿Habrían soñado alguna vez con burlarse, de esta manera pública y grosera, de una escena del Corán? Como digo, sabemos la respuesta a eso".

El obispo dijo amar la ciudad de París, donde hizo un doctorado durante tres años, pero esa escena en la inauguración de los Juegos Olímpicos fue "una burda burla de la Última Cena y no la describiré más. Simplemente, conéctense. Se ha vuelto viral. Se puede ver".

Para monseñor Robert E. Barron, Francia intentaba dar "su mejor paso cultural" pero cuestionó si es "correcto burlarse de este momento tan central en el cristianismo, donde Jesús en su Última Cena da su Cuerpo y Sangre en anticipación de la Cruz, y así se presenta".

Insistió en que se trató de "una burla grosera y frívola", cuando "Francia solía llamarse 'la hija mayor de la Iglesia', y más tratándose de París, que nos dio el pensamiento de Tomás de Aquino, a san Vicente de Paúl, al rey Luis IX, a franceses misioneros católicos en todo el mundo".

Expresó que "Francia -cuya cultura, y me refiero al respeto del individuo, de los derechos humanos y de la libertad, se basa en gran medida en el cristianismo- consideró que lo correcto era burlarse de la fe cristiana".

Finalmente, aseveró que "lo interesante aquí es que esta sociedad posmoderna, profundamente secularista, sabe quién es su enemigo. Lo están nombrando y deberíamos creerles. Nos están diciendo quiénes son. Debemos creerles, pero además nosotros los cristianos, nosotros los católicos, no debemos avergonzarnos. Deberíamos resistir. Deberíamos hacer oír nuestra voz".+