León XIV condenó el atentado terrorista que el domingo causó la muerte de 40 personas en una iglesia de la RD del Congo y recordó el 50º aniversario de los acuerdos de Helsinki.
León XIV volvió a clamar por la paz y pidió que se llegue a un diálogo: "Una nación no debe alzar nunca la espada contra otra" y expresa solidaridad con los cristianos en Medio Oriente.
El Santo Padre expresó su solidaridad con Ucrania, Israel, Gaza e Irán, "donde se eleva un grito de dolor a causa de la guerra".
"La situación en la Franja de Gaza es cada vez más preocupante y dolorosa", advirtió el pontífice en su primera audiencia general.