El Card. Orani João Tempesta llamó a la reconciliación y a la oración, tras el operativo a gran escala contra una banda de narcotraficantes, que dejó más de un centenar de muertos.
Con un contundente rechazo a los excesos, los obispos recordaron que "la violencia destruye la convivencia, debilita la democracia y lastima el alma del pueblo".
El episcopado ecuatoriano condenó los recientes episodios de violencia durante las protestas convocadas por la Confederación de Nacionalidades Indígenas. La comitiva presidencia fue atacada.
Frente al clima de violencia e inseguridad que vive el país andino, el episcopado peruano exhortó a la población a unirse por la paz y la defensa de la vida.