El obispo emérito de San Isidro aseguró que la verdadera oración "es una relación de amor y no un acto de autosuficiencia o comparación con los demás".
El obispo emérito de San Isidro compartió su reflexión pastoral, centrándose en la importancia de "orar sin desfallecer", ya que "la oración de súplica debe ser perseverante y humilde".
El obispo emérito de San Isidro aseguró agradecer "es un acto de justicia que abre el corazón a Dios, ya que la falta de gratitud genera egoísmo y división".
El obispo emérito de San Isidro subraya la ceguera espiritual provocada por la falta de caridad y la urgencia de una conversión del corazón para reconocer al otro como don de Dios.